Ginevra Potter caminaba por ese callejón, con todas las compras en la mano. Pero, apesar de estar apurada, freno en seco al escuchar un ruido extraño.

Una respiracion agitada se escuchaba a lo lejos, pero de la nada, más cerca sono el llanto de un bebé.

El llanto no cesaba, así que Ginny decidio acercarse más al fono del callejón.

En una caja de carton, envuelta en mantas moradas y azules, habia una pequeña bebé.

Ginny sostuvo en seguida a la bebé, y cuando se percato que habia caido una carta, se apresuro a leerla:

Quien sea la persona que lea esta carta, por favor cuide a mi niñita. Le pido con todo mi corazón, desde el fondo de mi alma que cuiden de mi pequeña. Si les preocupa: es sangre mestiza.

No intenten buscarme, ya será demasiado tarde, y yo solo deseo una cosa para mi bebé: un hogar. Ella nacio seis meses antes. Brindenle amor y cariño. Que crezca sana y salva. Cuidenla como yo no puedo hacerlo. Se llama Christal Heather y nacio el trece de Junio. Amenla. Cuidenla. Por favor s/

Allí terminaba la carta.

Ginny no podia dejar a esa niña ahí. A pesar de que le daba curiosidad su historia, lo que más le importaba era prtegerla. Decia que era sangre mestiza, así que Ginny deducio que era una bruja.

Escucho un grito a lo lejos y así que se aparecio rapidamente en el número 12 de Grimmauld Place.

Cuando entro, su esposo la vio extrañado por qué llevaba un paquete extra.

— Harry. No la podia dejar allí. Lee esta carta. — Antes de que él comentara algo, le tendio la nota —. La encontre en uno de los callejónes.

— ¿Nos la quedamos? — pregunto al terminar de leer.

Ginny miro a su esposo con los ojos iluminados.

— No podemos hacer otra cosa.

Harry sonrio de lado y se acerco a la bebé.

— Hola, Chris — saludo cuando la pequeña abrio los ojos.

— Christal Heather Potter — dijo Ginny.

La pequeña se rio.

Esa noche, acomodaron una habitacion que no usaban y la dejaron durmiendo en la habitacion.

— ¿Que les diremos a James? — le pregunto Arthur al llegar a su dormitorio.

— No creo que pregunte, además es demaciado pqueño para entenderlo — contesto ella —. Cuando sea más grande se lo explicaremos.