Mary Vance, chica mitad enano y mitad humano, estudiante de segundo año de Hufflepuff, sentía atracción hacia su héroe pero era muy tímida y lejos de acercarse a él pasaba el rato escondiéndose, lo cual tenía a Ludwig confundido pues aunque él sólo la veía como una estudiante más no comprendía el temor de la pequeña pelirroja, las chicas de Hufflepuff trataban de animarla para que se declarara mientras que los chicos retaban a Henrich constantemente para “probar” ser mejores pues la pequeña emanaba una ternura que enamoraba a muchos en Hogwarts, incluyendo a los de primer año, Ludwig no entendía la razón por la que tenía tantos enemigos pero no le daba muchas vueltas al asunto y trataba de salir del paso produciendo el mínimo daño posible a sus retadores. Así fue como el día que Ludwig partió de intercambio hacia Ilvermory dejó un rastro de estudiantes con dientes largos, lenguas torcidas, pies bailarines, narices goteantes, cuerpos atados, orejas gigantes y brazos de gelatina.
El día que llegó Ludwig a Ilvermory, el Director Agilbert Fontaine hizo toda la ceremonia para ubicarlo en alguna de sus casas, al pasar a la sala donde se encontraban los tótem alzó la vista a las 4 bestias y el Ave Trueno batió sus alas invitándolo a su casa, todos los estudiantes de la Casa ThunderBird aplaudieron y Henrich fue hacia ellos como su nuevo miembro, casi de inmediato notó la seductora mirada de una chica entre los estudiantes de la Casa Horned Serpent, se trataba de Hillary Mist quien cursaba su quinto año en Ilvermory.
Durante su estancia en Estados Unidos de Amércia, Ludwig tuvo constantes charlas con el Director Agilbert Fontaine quien encontraba muy interesante las experiencias del joven entre las filas de Lord Voldemort, en clases era blanco de admiración de sus compañeros de ThunderBird y en los ratos libres se le veía caminar con Hillary Mist de Horned Serpent, una chica alta, delgada, piel blanca, larga cabellera rubia y ojos verdes; por las noches Ludwig escuchaba que lo llamaban y seguía la voz hasta el árbol misterioso que había crecido de la varita de Salazar Slytherin, una de esas noches Ludwig fue encontrado por William el Pudwudgie.
Will: ¿Qué haces allí, chico? Deberías estar durmiendo.
Ludwig: Lo siento, señor, es que… es que escucho como si este árbol me llamara.
Will: Eres el chico irlandés de Hogwarts, ¿Cierto?
Ludwig: Henrich, Ludwig Henrich de Slytherin, señor… Bueno, de ThunderBird aquí en Ilvermory.
Will: Isolt también era irlandés y descendiente de Slytherin, igual que tú.
Ludwig: ¿Conociste a Isolt Sayre, la fundadora de este colegio?
Will: ¿Cuántos años crees que tengo!... ¿Dices que el árbol te llama?
Ludwig: Sí, cada noche, lo siento… por lo de su edad.
Will: ¡Bah! No importa. Isolt enterró la varita de Salazar Slytherin justo aquí y de ella nació este árbol que alberga magia muy misteriosa y poderosa, quizá sea la razón por la que escuchas que el árbol te llama, esa varita pasaba de generación en generación entre los descendientes de Slytherin y de seguir existiendo podría haber llegado a ser tuya.